Tras unos meses con él, y después del desafortunado accidente que he tenido ( se me ha caído y se ha roto la pantalla) voy a contaros mi experiencia durante el tiempo que lo he usado.
Comenzaré hablando sobre su aspecto, dejando de lado el tema de los materiales que se han usado, huelga decir que el móvil es sobervio. Considero su delgadez y peso algo muy reseñable si lo comparamos con otros móviles de tamaño similar, nada más sacarlo de su caja es algo que me agradó.
Empezaré hablando de la pantalla, este modelo monta una pantalla SuperAmoled Plus que ofrece una calidad de visión envidiable tanto en interiores como en exteriores a pleno sol. El panel táctil responde tal y como se espera en un móvil de gama alta.
En cuanto al uso de las diversas aplicaciones a las que podemos acceder gracias al Android Market, he notado que todo funciona con una fluidez exquisita. Tengo experiencia con muchos otros terminales Android (HTC Hero, HTC Desire, Galaxy S) y en determinadas ocasiones notaba pequeños parones, cosa que no me ha pasado con el S2. La razón de esto se debe a su potente hardware interno, monta el chip Exynos de doble núcleo a 1 GHZ, 1 GB de memoria RAM y la GPU Mali-400, que si bien no está del todo explotada, promete y mucho.
En cuanto a multimedia, he podido reproducir todo tipo de formatos de video y audio sin ningún problema, desde .AVI a .MKV.
La cámara ofrece una calidad considerable, graba videos a 1080p y tanto en buenas condiciones, como en condiciones no tan idóneas la calidad es más que aceptable. Bajo mi punto de vista, vería con buenos ojos la inclusión de un botón dedicado a hacer la foto.
Por último, comentaré el que para mí es el problema de todos los smartphones del momento y no es otro que la autonomía. Aún pasando del día con un uso medio-alto, creo que es el momento que las compañías empiecen a investigar mejoras en este tema, ya que opino que de potencia bruta vamos más que sobrados y lo que ahora necesitamos es tiempo de sobra para disfrutarla.
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